miércoles, 27 de mayo de 2009

9. Tipos de decisiones


Las decisiones que pueden tener que tomar las personas como individuos o como responsables de una organización son infinitas, tanto por la variedad de la materia como por su número. Aun así, los estudiosos de la materia han intentado clasificarlas según diversos factores. Podemos citar como las más frecuentes e importantes el número de individuos, su cargo dentro de una empresa, el método que se siga para tomar una decisión, las personas que la aprueben...
  • Según el número de individuos
Puede ser individual o en grupo.
Una decisión es individual cuando es tomada por una sole persona, que tiene la responsabilidad final sobre el asunto en cuestión. Son frecuentes este tipo de decisiones en empresas pequeñas en las que el empresario trabaja y dirige a la vez. También son individuales muchas de las decisiones que nos afectan como seres humanos, como elegir qué camino tomar, si seguir estudiando o trabajar, si hacer estudios universitarios o de grado Superior...

Las decisiones grupales son tomadas por varias personas sobre las que recae la obligación de decidir de forma conjunta. Todas las personas obligadas a decidir tendrán la misma información sobre el asunto.
Un ejemplo de este tipo de decisiones, llamadas también colegiadas, son las sentencias que recaen en el tribunal Supremo, las decisiones de los consejos en sociedades mercantiles, o las de los socios de cualquier tipo de asociación. Estos grupos suelen establecer sistemas de votación para la toma de decisiones.



  • Según el grado de consenso.

Según las personas que aprueben las decisiones, se distingue entre las siguientes:

Autoritarias: Son decisiones que tienen que ser asumidas por las personas afectadas al venir impuestas por individuos con autoridad indiscutible y aceptada en los grupos.

Por votación mayoritaria: Se decide lo que la mayoría del grupo apruebe.

Por unanimidad o consenso: Se decide sobre aquello en lo que todos los miembros del grupo están de acuerdo y han apoyado la misma opinión o idea.


  • Según la experiencia de quien decide.

Según el grado de experiencia del decisor se diferencia entre:

Decisiones tomadas en función de las situaciones y vivencias del decisor: Este elegirá entre las opciones que tenga en función de los resultados que haya tenido en ocasiones parecidas. En este tipo de decisiones, lo importante son los hechos que haya vivido la persona y que le han marcado internamente.

Decisiones tomadas según la costumbre: La persona que tiene que asumir la responsabilidad de la decisión elige la opción que de forma continua viene eligiendo para resolver este tipo de asuntos concretos.
Un ejemplo de este tipo de decisión, el de un directivo que en su empresa se plantea comprar vehículos nuevos, y elige una marca porque es la que , por costumbre, se utiliza siempre en la empresa.

Según el método.

Tradicionalmente se propone la siguiente clasificación.

Programables: Son decisiones que se toman sobre asuntos rutinarios en los cuales ya está establecido cómo se deben llevar a cabo. En este supuesto no es necesario que se traten los problemas como si fueran nuevos, puesto que las personas y organizaciones están familiarizadas con ellos.
Por ejemplo, la renovación o extinción de un contrato de trabajo temporal al momento de su finalización, cuya fecha de fin ya se conocía de antemano.



No programables: Decisiones nuevas que se toman cuando surgen circunstancias que no están previstas.
Podemos señalar como decisiones no programables las decisiones de emergencia en situaciones por causas de fuerza mayor, como terremotos o inundaciones.
Tampoco sería programable el caso de un grupo de trabajadores bajo la dirección de un mando intermedio que entra en conflicto con la forma de dirección de éste, en el que un mando superior ha de tomar las decisiones adecuadas que solventen el problema.
  • Según el grado de racionalidad.
Se puede hablar de:

Decisiones racionales: Son aquellas en las que el sujeto elige una de las opciones después de desarrollar un proceso racional siguiendo las etapas básicas de todo proceso de decisión.

Decisiones tomadas por intuición: Son aquellas en las que el individuo elige una opción entre varias en función de la capacidad del sujeto de entender las cosas sin necesidad de un razonamiento lógico. El decisor percibe una alternativa como válida en función del sentimiento de que esa opción es la correcta.




  • Segun la teoría clásica de Le Moigne.
    Las decisiones se clasifican en diferentes niveles:

    Decisiones estratégicas o de nivel 1: Se caracterizan por ser adoptadas por el nivel superior jerárquico de las organizaciones. Se consideran decisiones muy importantes en las empresas, a veces de carácter irreversible.
    Por ejemplo, la ampliación de capital en una epmpresa, la fusión con otra...

    Decisiones tácticas o de nivel 2: Se trata de decisiones normalmente reversibles. Son ejecutadas por los mandos medios de las empresas.
    Son decisiones que tratan de conseguir una utilización óptima de los recursos, como las tomadas por los técnicos a la hora de comprar una máquina o emplear un trabajador para determinada tarea.
    Decisiones operativas o de nivel 3: Se desarrollan en el quehacer diario del trabajo. Son tomadas por los trabajadores de las empresas en su labor diaria.
    Son decisiones que tiene que tomar un trabajador, por ejemplo, de una gestoría entre realizar las gestiones de calle a primera o a última hora.

7. Actitudes ante la toma de decisiones

Estilo impulsivo


Por lo general, tomas tus decisiones de modo muy rápido, sin reflexión, respondiendo únicamente a los deseos inmediatos, sin analizar las consecuencias.





Estilo dependiente


Si tienes únicamente en cuenta las opiniones de los otros y buscas principalmente la aprobación o valoración de los demás; sobre todo, de tus compañeros (“quedar bien ” o “seguir la corriente").





Estilo autónomo



Eres una persona que no te dejas influenciar por la moda , la presión social o los medios de comunicación .





Estilo racional


Si eres una persona que reflexiona antes de decidir, busca información, analiza las distintas alternativas y valoras las posibles consecuencias de cada una de ellas.




De todas estas formas, el estilo racional es el que brinda una mayor probabilidad de tener éxito al tomar una decisión.

8. Principales errores en la toma de decisiones



El Principal problema ante la toma de decisiones es el desconocimiento. Ya sea de factores externos o falta de experiencia.

Por esta razón podemos asociar diversos errores a los distintos factores que influyen en la toma de decisiones.

En los factores externos, el mayor error es no darles la importancia ni el análisis suficiente, dando a estos factores una valía menor de la que poseen. Estos son la estabilidad de nuestro entorno y el riesgo que podemos correr al tomar una decisión.


La presión puede influir mucho a la hora de tomar decisiones, llegando incluso a vencernos, de tal manera que nos angustiamos y doblegamos. El error cometido con mayor frecuencia es sobreimponer las presiones a la capacidad de decisión, anulando esta última por la mera presencia de presión.

Con el tiempo del que disponemos para tomar una decisión, lo peor es "ya lo haré que todavía tengo tiempo" y alfinal nos damos cuenta que es mañana cuando hay que tomar una decisión, y todavía no hemos empezado a pensar en ella.

La actitud que hemos de tomar a la hora de tomar decisiones es siempre positiva, no darnos por vencidos desde un principio, o pensar que el problema nos viene grande.

Infravalorar nuestras propias aptitudes es sin duda uno de los mayores a la hora de plantearnos hacer una u otra cosa. Hemos de tratar de conocer qué y qué no somos capaces de hacer, no tan sólo imaginarlo y tomar de esta manera decisiones sobre hechos irreales.

La mejor decisión es la que ha tenido más información de análisis para llevarse a cabo, por lo que no escuchar al resto del grupo, no hacer caso de la razón, o de la intuición, o no innovar y quedarse estancado en "siempre se ha hecho a
sí" es siempre una fuente de errores a la hora de tomar una decisión.

Todo aquello que nos hace humanos y nos deja la opción de decidir, es justo lo que nos puede hacer cometer errores a la hora de decidir, por lo que siempre hay que detenerse a analizar, y sobre todo, saber que si nos equivocamos, no es el fin del mundo, que siempre podemos volver a intentarlo, con muchas ganas y con más experiencia la próxima vez.

'12', misma historia, distinto escenario


Dirigida por el venerado actor y director ruso Nikita Mikhalkov, '12' es una nueva adaptación de la obra teatral de Reginald Rose, ya llevada al cine con maestría por Sidney Lumet en 1957, y que el propio Mikhalkov también trasladara hace algunos años a los escenarios. Nominada al Óscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa y al León de Oro en el pasado Festival de Venecia, '12' cuenta la historia de un chico checheno de 18 años acusado de asesinar a su padrastro, un oficial del ejército ruso. Doce miembros de un jurado popular son encerrados en el gimnasio de una escuela para decidir su destino. La decisión debe ser unánime, pero cuando la vida de alguien está en juego, siempre hay espacio para la duda, y las tensiones acaban por explotar...

Valiente aunque inacabable film resulta ser '12', el primer largometraje de Nikita Mikhalkov tras ocho años de silencio desde 'El barbero de Siberia'. Con nada más y nada menos que 153 minutos de duración, esta versión rusa de Doce hombres sin piedad pretende tanto actualizar una obra maestra del cine y el teatro como trasladar su acción a un nuevo escenario, que no es otro que una sociedad rusa que se encuentra entre los ecos del comunismo y los nuevos aires del capitalismo.

De la Guerra fría al postcomunismo

'12' posee no pocas virtudes, entre las cuales cabe destacar por encima de todo el tratamiento de sus personajes, individuos concienzudamente retratados que otorgan a la película de Nikita Mikhalkov un crisol de personalidades muy por encima del cuasi monólogo de Henry Fonda (amén de su antítesis, interpretado por Lee J. Cobb) visto en la película de Lumet. Es precisamente dicho abanico de personalidades el que distancia a 12 de 'Doce hombres sin piedad', pues si en la película de Lumet, Henry Fonda encarnaba el discurso de unos valores liberales, o lo que es lo mismo, al ciudadano íntegro que justificaba su discrepancia a través de la duda razonable (y, contextualmente, supeditaba el recelo y el miedo instaurado en la mentalidad norteamericana como consecuencia de la Guerra Fría en favor de su visión de la justicia), en '12' imperan las vivencias personales, reflejando la poca confianza que inspira la justicia legal en la mentalidad rusa, guiada más por instintos que por normas.

De este modo, todos y cada uno de los personajes de '12' alteran su veredicto en favor de su propia experiencia (o la de otros), justificando así su racionamiento de un modo mucho más exhaustivo que su homóloga norteamericana, además de reflejar a través de sus vivencias personales los diferentes temores y tabúes de una sociedad en reconstrucción hasta hace bien poco hermética, la cual refleja sus miedos a través de los recelos, los complejos, un abierto racismo -y, de un modo muy inferior, el sexismo- y la demagogia.

Además, la película de Nikita Mikhalkov otorga especial fuerza a la idea del Destino, esa suerte de energía invisible que guía nuestros pasos y que adquiere tintes de justicia divina -esa estampa que el personaje de Sergei Makovetsky deja presidiendo la sala-, en todo un alegato a las segundas oportunidades, al rechazo de las primeras impresiones (o impulsos) y del odio y el rencor, en una película repleta de metáforas -ese pájaro encerrado en el gimnasio que es finalmente liberado, o ese reiterativo can bajo la lluvia- y de segundas lecturas, todas ellas trasladables a un contexto social.

Por otro lado, '12' es una película inconfudiblemente rusa, con unos personajes -como mínimo- pintorescos, dotados de un curioso sentido del humor y de una gesticulación casi teatral. Dentro de dicha teatralidad podría incluirse también el resto de elementos que componen 1'2', con una cámara que juega constantemente con los contrastes, que sitúa en todo momento a Mikhalkov dentro de su encuadre a pesar de carecer de diálogo como elemento privilegiado, y que concede a la acción que en ella transcurre cierta grandilocuencia, cierto tono operístico que se compagina y al mismo tiempo contrasta con las contundentes escenas de acción a modo de deja-vú del joven juzgado, cuya factura es eminentemente hollywoodiense.

Por desgracia, todas estas virtudes quedan supeditadas a una imperante sensación de irregularidad que en realidad no es tal, pero que nace tanto de una duración desproporcionada como de una sensación de innecesariedad que pasa irremediable factura en un espectador que, por contra, puede que una vez haya dejado reposar sus dos horas y media de metraje, recuerde más las virtudes de '12' que sus carencias.


Trailer de la película


Humor

6. Factores que influyen en la toma de decisiones





La toma de decisiones no es un proceso que pueda ser realizado por las personas aislándose completamente de las circunstancias que los rodean. Más bien al contrario, es un proceso en el que los sujetos se ven influidos por un conjunto de circunstancias que afectarán a la hora de tomar la decisión. Estas circunstancias vienen determinadas por dos condicionantes.



  • El primero se centra en el hecho de que el proceso es desarrollado por seres humanos que gozan de su propia psicología y carácter, que lógicamente van a influir a la hora de tomar decisiones.





  • El segundo parte de la base de que los sujetos se dejan influir por el entorno o circunstancias que les rodean o que envuelven la situación sobre la que hay que decidir


Por ello, se pueden dividir los condicionantes que influyen en los procesos de decisión entre factores externos a la persona que decide, y condicionantes internos a quien decide en cuestión.



  • Factores y condicionantes externos.


La estabilidad del entorno: Cuando el entorno que rodea la toma de decisiones goza de estabilidad se facilita el proceso de toma de decisiones. Esto es así porque el propio medio genera la certeza, entre los sujetos que intervienen en la toma de decisiones, de que las consecuencias de la opción elegida van a permanecer entre los límites por ellos supuestos, lo que limita en gran medida la incertidumbre sobre los resultados.
Si imaginamos una empresa que tiene que decidir comprar materia prima para su producción anual, y el pedido ha de hacerlo una vez al año. Si las condiciones de producción y venta son estables, la decisión sobre la cantidad a pedir se tomará con más confianza y seguridad que si se pasa por una situación como la actual, de inestabilidad comercial. La estabilidad del entorno viene influida por los propios límites que imponga el mercado y por los cambios que se producen en el mismo. Empresas constantemente sometidas a cambios, necesitarán un cuidadoso análisis de las causas de los mismos y de sus efectos para tomar las decisiones oportunas.

El riesgo: Puede ser definido como la posibilidad de que un evento o circunstancia, dañinos o no deseados, se produzcan. Cuando es preciso tomar una decisión hay que analizar qué posibilidades existen de que la alternativa elegida lleve al resultado esperado. Para ello habrá que analizar las consecuencias de cada alternativa.
Puede ocurrir que a pesar de los análisis llevados a cabo, no pueda precisarse qué consecuencias tendrá la opción que se vaya a adoptar. En estos casos, el riesgo que se asumirá será elevado. También es posible que, a pesar de saber las alternativas que cada opción tenga, sea difícil decidirse por una u otra.
Un ejemplo de este tipo de circunstancias suele plantearse cuando, ante una enfermedad, los médico sseñalan las probabilidades de quedar bien ante una operación, y existe un 80% de quedar mejor y un 20% de quedar igual o peor.
Como se puede apreciar, aunque las probabilidades de mejorar sean elevadas, si la decisión pone en juego aspectos muy importantes de la persona, la dificultad al elegir será elevada.

Las presiones: Es casi inevitable la existencia de presiones ante ciertas decisiones que implican cambios importantes. Son más fuertes cuando los cambios afectan a aspectos importantes de la vida. Una vez que las presiones están encima de la mesa no se pueden despreciar, sino que hay que tenerlas en cuenta para la toma de decisiones. La influencia estará en función del poder con que se hagan las presiones.

El tiempo: El tiempo del que se dispone para tomar la decisión y el poder de quien toma la decisión son factores fundamentales en la resolución de conflictos.




  • Con mucho tiempo y poco poder, lo mejor es analizar bien la situación e intentar llegar a acuerdos beneficiosos para todos.


  • Con mucho tiempo y mucho poder se puede pensar bien cuál es la decisión más beneficiosa si no se logra un acuerdo.



  • Con poco tiempo y poco poder, lo más probable es que haya que ceder y no se puedan imponer soluciones.



  • Con poco tiempo y mucho poder, puede ocurrir que haya que elegir una alternativa sin negociarla con nadie.




  • Factores y condicionantes internos.
Junto a los factores externos, en la toma de decisiones influyen notablemente las características individuales del decisor.
Desde el punto de vista psicológico, se señala que los principales factores internos a tener en cuenta ante la toma de decisiones son:

La actitud: Cuando hablamos de actitud nos estamos refiriendo a la manera en la que nuestra ánimo o nuestra mente se enfrentan con determinadas circunstancias.
La actitud que mantengan los sujetos que han de tomar decisiones ante las situaciones sobre las que hay que decidir influirá en la propia elección.

La aptitud: Se conoce con esate nombre al conjunto de capacidades físicas, intelectuales o sociales que tenemos cada uno de los seres humanos.
Por ejemplo, un representante sindical tendrá más facilidad para negociar con la empresa si tiene habilidades naturales.

La experiencia personal y profesional: La experiencia influye en gran medida sobre los procesos de toma de decisiones. Cuanto mayor es la experiencia, menor es la posibilidad de cometer errores, ya que es común utilizar las mismas soluciones para problemas similares planteados en el pasado.

La cultura en que vive el decisor: Nos referimos al conjunto de ideas, sentimientos, valores, tradiciones, estilo de vida y creencias que determinan la forma de vivir de un determinado grupo de personas. Es indudable que la cultura en la que se encuentra inmerso un sujeto va a afectar a la manera y tipo de decisiones que se tomen, tanto individuales como grupales.
La persona que toma decisiones deberá ser capaz de reconocer sus propios valores para tener claro cómo éstos van a incidir en la toma de las decisiones que tenga que realizar. Es decir, las personas toman decisiones en función de lo que es importante para ellas.






  • La creatividad.
Junto a los factores ya expuestos, las últimas tendencias de la Psicología incorporan a la creatividad como un factor esencial en la toma de decisiones.
En el análisis del fenómeno creativo hay que señalar que todos los seres humanos tienen la capacidad de crear.
La creatividad supone ver o analizar las cosas desde posiciones diferentes a las que son habituales, que permita crear situaciones que en principio no se esperaban.
En estas últimas tendencias se considera que la creatividad consiste en "hacer y comunicar nuevas relaciones con sentido para ayudarnos a experimentar de diversas formas y tomar diferentes puntos de vista, para ayudarnos a pensar en posibilidades nuevas e inusuales, para guiarnos en la generación y selección de alternativas".

La creatividad es una importante fuente de soluciones para los problemas.